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El uso de antibióticos es prescindible en el 90% de los procesos infecciosos

El uso de antibióticos es prescindible en el 90% de los procesos infecciosos

Fecha de publicación: 20 de junio de 2012

 

• En España se consumen más antibióticos de los necesarios

• Los médicos de familia demandan formación en enfermedades infeccionas y herramientas de diagnóstico en las consultas

• Las campañas de sensibilización de la población son imprescindibles

El actual uso de los antibióticos en España, y la necesidad de limitarlo a los casos realmente necesarios, han sido temas que los médicos de familia han abordado en el XXXII congreso de la semFYC en Bilbao. Varios estudios avalados desde la semFYC y presentados durante el Congreso ponen de manifestó el consumo innecesario de antibióticos en nuestro país y en paralelo la necesidad de prescribirlos exclusivamente cuando las infecciones son bacterianas y no en las infecciones víricas.

El coordinador del grupo de infecciosas de la semFYC, el doctor Josep María Cots, está convencido de que en España se hace un uso abusivo de los antibióticos, "España es un país con el concepto extendido de que los antibióticos curan todas las infecciones. Funcionamos con el famoso triángulo, fiebre equivale a infección y ésta se trata con antibióticos y esto no es así. Con antibióticos hay que tratar sólo en algunos casos", y añade, "la infección se produce por un virus en el 90% de los casos y en un 10% de los casos está motivada por una bacteria. El antibiótico sólo es efectivo frente a las bacterias. Con lo cual; podemos concluir que el antibiótico es prescindible en el 90% de los casos de infección".

A pesar de que se ha mejorado, España está por encima de la media europea respecto al uso de antibióticos, el modelo a seguir tal y como señala el doctor Cots, es Holanda, "El país europeo donde más antibióticos se consumen es Grecia y el que menos Holanda. Grecia consume 4 veces más que Holanda, con lo que eso supone. Por su parte, los holandeses a pesar de que son los europeos que menos antibióticos consumen, siguen realizando campañas de sensibilización para reducir aún más ese consumo".

En este contexto, es necesario seguir insistiendo en hacer llegar a los pacientes a través de campañas de sensibilización la importancia de tomar antibióticos sólo cuando su uso esté justificado, "Los pacientes", dice el doctor Cots, "tienen que saber que nunca deben tomar un antibiótico si éste no ha sido prescrito por un médico, nunca deben tomarlo por su cuenta tras haberlo comprado en la farmacia. Las farmacias por su parte, ni deben ni pueden legalmente vender antibióticos sin receta médica".

Junto a esto, desde la semFYC se reclama además que los envases en los que se dispensan los antibióticos estén adecuados a los tratamientos prescritos. "Hoy por hoy, los envases no están adaptados a los días del tratamiento, sobran, y terminan quedando en el botiquín casero. Las farmacéuticas deben adaptar los envases a los días de tratamiento, puede parecer baladí, pero si lo interpretamos a nivel macro nos encontraremos con cifras muy importantes", explica este experto.

Formación e instrumentos de diagnóstico para los médicos de familia

El coordinador de infecciosas de la semFYC considera que teniendo en cuenta que los médicos de familia son los responsables directos de la prescripción de antibióticos, en el 90% de los casos, requieren formación. "Los médicos de familia necesitan formación en enfermedades infecciosas porque los procesos van variando y los microorganismos son cada vez menos resistentes, hasta el punto, de que pueden recetarse antibióticos antiguos como la penicilina".

El doctor Cots añade, "Se necesitan herramientas de diagnóstico en la consulta, que permitan determinar si los procesos infecciosos están originados por bacterias o virus. Así, para diferenciar si la amigdalitis es bacteriana disponemos ya en la consulta del test strepA y además tenemos la PCR, el PCR capilar en este momento está en estudio, pero puede ser un instrumento interesante para diferenciar una bronquitis de una neumonía. En definitiva, el médico necesita saber cuando no dar el antibiótico y prescribir tranquilo".