Especial congreso Semfyc: Los médicos de familia califican una de cada diez consultas como encuentros difíciles
El objetivo del estudio, en que se han analizado 11.684 encuentros médico-paciente, es valorar los sentimientos y emociones tanto de los facultativos como de los usuarios en la consulta
Aproximadamente el 15% de las consultas son calificadas por los médicos de familia como "encuentros difíciles" (ED). Así lo pone de manifiesto los resultados del estudio REMEDIO que se han presentado en el marco del XXVIII Congreso Nacional de semFYC, que estos días se celebra en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid. El objetivo del estudio, en el que se han analizado 11.684 encuentros médico-paciente, es valorar los sentimientos y emociones de los facultativos cuando pasan consulta. "Además de nuestras emociones, se ha tenido en cuenta la visión de los pacientes y los factores del entorno, como son la hora de consulta o el día de la semana, que pueden influir tanto en la relación médico-paciente", afirma el doctor Juan Ángel Bellón Saameno, médico de familia, coordinador del grupo de investigación SAMSERAP de la redIAPP (Red de Investigación en Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud) y autor principal del estudio.
En el estudio REMEDIO se analizaron tres aspectos: la cualidad e intensidad de la respuesta emocional de los médicos de familia en los ED; conocer el grado de dificultad emocional del paciente en el ED y analizar los factores del paciente, médico y del entorno-organización asociados. En el estudio han participado un total de 45 médicos de familia pertenecientes a ocho centros de salud de Jaén y Málaga.
Después de cada consulta, el médico puntuaba su malestar emocional en una escala de 7 puntos, de 0 (ningún malestar) a 6 (malestar extremo). Se consideraba un ED para el médico cuando éste puntuaba 4 (malestar intenso), 5 (malestar muy intenso) o 6 (malestar extremo). "Cada día", explica el doctor Bellón, "los médicos valoraban sus encuentros médico-paciente y se seleccionaba, de forma aleatoria, un ED entre los de mayor puntuación. Posteriormente, se cumplimentaban los cuestionarios de emociones y pensamientos relacionados con el encuentro seleccionado. Una vez hecho esto, se intentaba concertar una cita con el paciente implicado".
Sólo un 21% de los encuentros se realizaron por la tarde y la mayoría tuvieron lugar entre las 09.00 y las 12.00 horas. Los médicos tuvieron una media de 40 encuentros diarios. El 30.8% de los encuentros se puntaron de 0 ("ningún malestar emocional") y el 13.3% como malestar emocional grande, muy grande o extremo. Este último fue superior para pacientes mujeres (14.5%) que para varones (11.5%). La proporción más alta de ED se produjo cuando médico y paciente eran mujeres (16.5%) y, la más baja, cuando ambos eran varones (11%). "Aunque los resultados de este estudio no nos dicen el por qué es más frecuente con pacientes mujeres", subraya este experto, "quizás pueda estar relacionado con que las féminas acuden más a la consulta, sobre todo entre los 35 y 65 años. Es curioso que se agudice cuando coincide que el profesional y la paciente son mujeres, pero este estudio no nos facilita información sobre cómo influyen las diferencias de género".
Otras variables
La mayor edad del paciente se relacionó con mayor percepción de ED por parte del médico de familia. En cuanto a las variables relacionadas con la organización, la hora de la consulta sólo fue significativa en el tramo de las 19.00 a las 20.30 horas respecto a la mayor percepción de ED, y sólo en pacientes mujeres; al igual que los jueves y viernes que tuvieron menor percepción de ED. "Aunque tampoco tenemos una explicación objetiva de esto a través del estudio", comenta este experto, "de manera informal, los médicos de familia coincidimos en que el horario de tarde es especialmente difícil, tanto porque la mayoría prefiere trabajar por la mañana como porque el perfil del paciente es distinto al de la mañana. En relación a los días de la semana, es frecuente que los lunes y martes sean los días que más cargadas tenemos las agendas y estemos más desahogados a final de semana".
Perspectiva de los pacientes
"Sin duda", asegura el doctor Bellón, "el aspecto menos estudiado en el conocimiento de los encuentros difíciles es la perspectiva del paciente. Por lo que también hemos realizado un sub estudio en el que se analizaron los encuentros difíciles desde la visión de los pacientes y sus factores asociados. De los 11.684 encuentros analizados, se realizaron 336 entrevistas a pacientes. De los encuentros percibidos como difíciles por los médicos, los pacientes puntuaron como 0 (ninguna dificultad emocional) casi en el 50% (48.5%) y sólo lo percibieron como tal el 7.8%".
Los pacientes entrevistados en su mayoría eran mujeres de mediana edad, casadas, con un nivel de estudios bajo, que trabajan en el hogar o estaban jubiladas. Un 32.8% tenían dificultades económicas; un 76.2% presentaron algún tipo de minusvalía o dolencia de larga evolución; una percepción de salud mala del 72% e insatisfechos con la convivencia en el hogar en un 32% y con una alta tasa de visitas al médico (13.2/año). El 58% sufrió al menos un acontecimiento vital estresante en los últimos 6 meses y refirmen un déficit de apoyo familiar y de amigos en el 26.8%.
Al analizar los motivos de consulta, merece la pena destacar la diferencia entre el 23.5% con más de un motivo de consulta según los médicos y el 47%, según los pacientes; el 5.1% de problemas psico-sociales según los médicos y casi el doble (9.8%) cuando le preguntamos al paciente. "Por ejemplo", explica el doctor Bellón, "un paciente viene por mareos, dolor de cabeza, cansancio y nerviosismo, y el médico decide que es un único problema de ansiedad y así lo incluye en su historial. Al paciente cuando se le pregunta dice que acudió porque tenía distintas molestias, que no ha relacionado entre sí, y que el médico tampoco le explica que todo se debe a un único tarstorno".
En relación a la comunicación con el médico, los pacientes valoran positivamente el apoyo emocional, la información recibida y que se tiene en cuenta su punto de vista, así como sus expectativas en relación a la prescripción, petición de pruebas y derivaciones. En opinión del doctor Bellón, "hay un hecho incuestionable, que es que la mayoría de los ED que son calificados así por el médico, son percibidos como satisfactorios por parte del paciente. Cuando coincide que ambos, médico y paciente, creen que hay un problema, normalmente responde a una mala comunicación. Según este estudio hay tres aspectos interesantes: 1) que el médico trata de "disimular" o tapar su malestar emocional con el paciente, consiguiéndolo en muchos casos; 2) que cuando no lo consigue, el paciente lo percibe fundamentalmente en forma de mala comunicación médico-paciente; y 3) la intervención dirigida a evitar los encuentros médico-paciente difíciles, además de intentar modificar la percepción de malestar emocional del médico, debería incluir la mejora de sus habilidades de comunicación".
En cuanto al entorno, los pacientes destacaron la dificultad para conseguir una cita en el 23.2%, el tiempo de estancia en la sala de espera (36%), la frecuencia de interrupciones en la consulta (18.4%) y la percepción de confortabilidad dentro de la consulta (90.2%). Se puede concluir que sólo un 52% de los pacientes que participaron en los ED perciben algún tipo de malestar emocional respecto al encuentro. El perfil del paciente destaca su mejor salud en general, pero con mayores niveles de ansiedad, dificultades en la convivencia en el hogar y económicas.
Emociones y sentimientos de los profesionales
Entre las emociones valoradas de los profesionales, la prevalencia por orden descendente fueron la ansiedad, impotencia, desconfianza e ira, inseguridad y emociones positivas. En cuanto a pensamientos, y también en orden descendiente, fueron la desesperación, el bloqueo relacional, la búsqueda de soluciones, el fracaso, el maltrato profesional y el rechazo. "En este estudio se ha descrito un arco iris emocional de los médicos de familia en los ED. De las conclusiones podemos señalar que lo que produce el malestar emocional no es el evento estresante en si mismo, sino cómo se percibe este encuentro. Lo que explica que los médicos más neuróticos o con problemas de ansiedad y aquellos con menos apoyo social de su familia y amigos perciben más dificultad en los encuentros médico-paciente a igualdad de presión asistencial. Por el contrario, los profesionales que son más extrovertidos y sociables, con mayor apoyo afectivo y estabilidad emocional, tendrían menos ED en la consulta. Este tipo de factores internos del facultativo fueron, por tanto, más predictivos del malestar emocional que aquellos relacionados con la propia organización, como son el número de pacientes atendidos, horarios, etc. La conclusión práctica es que podría ser más efectivo intervenir sobre estos factores internos del médico que sobre los factores organizativos", concluye el doctor Bellón.