Los médicos de familia de Madrid aprenden en un taller cuando y a quién recomendar la auto-medición ambulatoria de la presión arterial
En el XVII congreso de la Sociedad Madrileña de Medicina Familiar y Comunitaria, celebrado el 11 de abril, los médicos de familia de Madrid analizaron la utilidad y aplicación de la Auto-Medición ambulatoria de la Presión Arterial (AMPA) en el control de los enfermos hipertensos, y la forma de potenciar su uso entre sus pacientes para mejorar dicho control.
La Hipertensión Arterial (HTA) es un problema muy frecuente; según el estudio realizado en nuestros país (Controlpres del año 2003), el 68% de los mayores de 60 años está afectado por ella, y el porcentaje de pacientes controlados es claramente insuficiente, 38’8%.
Entre las medidas que pueden ayudar a mejorar el manejo de la hipertensión se encuentra la Auto-Medición ambulatoria de la Presión Arterial (AMPA). Actualmente se dispone de diversos aparatos que permiten hacer las medidas de presión arterial en el entorno habitual del paciente y mientras éste realiza sus actividades cotidianas, lo cual aporta información adicional sobre su presión arterial. Estos datos no deben considerarse como sustitutivos de la información que proporciona la medida convencional de la presión arterial en consulta, pero cada vez son más tenidos en cuenta y en las últimas guías de manejo de la HTA se considera que se debe potenciar en los pacientes el uso de AMPA.
La automedida domiciliaria de la presión arterial obtiene lecturas en distintos días, y en circunstancias próximas a la vida real. Promediando periodos de varios días se obtienen valores que comparten muchas de las ventajas de la presión arterial ambulatoria sobre la presión arterial de consulta, es decir, la falta de un significativo efecto de bata blanca, la mayor reproducibilidad y una aproximación a la presencia de daño orgánico y del riesgo de episodios cardiovasculares .
Existe un problema bastante extendido, y es el uso de aparatos no adecuados. Son muy pocos los aparatos de medida en la muñeca disponibles en la actualidad que estén validados con resultados satisfactorios, y sin embargo se publicitan incluso en espacios de salud en televisión.
Este procedimiento relativamente barato puede mejorar el cumplimiento del tratamiento por el paciente, que debe saber que tiene que aportar al médico los valores medidos, debidamente documentados, y que no debe modificar por su cuenta el régimen terapéutico.