La semFYC publica una guía para AP con la que intervenir en consumos de alcohol de riesgo
El consumo de alcohol es una de las primeras causas prevenibles de morbilidad y mortalidad en nuestro país. Se relaciona con más de 200 problemas de salud, enfermedades y lesiones. Y la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica el alcohol como un agente cancerígeno del grupo 1, el de mayor riesgo con la misma categoría que el del humo del tabaco o las radiaciones ionizantes.
Ante esta perspectiva, el PAPPS-semFYC ha elaborado una guía Para el cribado e intervención breve en el consumo de riesgo y perjudicial de alcohol en Atención Primaria. Se trata de la primera publicación que se hace en colaboración con el Ministerio de Sanidad para abordar este asunto.
El objetivo de la misma es ofrecer a los profesionales sanitarios una herramienta basada en la evidencia, que pueden aplicar de forma simple y rápida. Está destinada a personas con un consumo de riesgo o perjudicial de alcohol, por lo que no es aplicable en personas que beben por debajo de los límites de consumo de bajo riesgo. Aunque sí es necesario dejar claro a los pacientes que cualquier consumo de alcohol implica un riesgo para la salud.
Está demostrado que las intervenciones breves son efectivas para reducir el consumo de alcohol en personas con consumo de riesgo, por lo que es más que recomendable que se lleven a cabo. Se trata, además de una de las intervenciones sanitarias más baratas que conducen a una mejora en la salud.
Objetivos:
- Proporcionar una forma sencilla de identificar a las personas cuyo consumo de alcohol puede representar un riesgo para su salud, y a aquellas que ya han experimentado problemas relacionados con el alcohol.
- Proporcionar información a los profesionales sanitarios para desarrollar un plan de intervención.
- Proporcionar a los pacientes consejos personalizados que pueden utilizarse para motivarlos a cambiar su consumo de alcohol.
La guía cuenta con infografías sencillas de entender, test que ayudan a determinar el nivel de consumo para poder evaluar el riesgo y ofrecer consejos y ayuda al paciente. Y finaliza con una guía de habilidades de comunicación y atención centradas en la persona.