Actualidad
Un tercio de los adolescentes que lleva un

Un tercio de los adolescentes que lleva un "piercing" cree que no supone ningún riesgo

Fecha de publicación: 08 de junio de 2011



• Un estudio presentado en el Congreso de Zaragoza con más de medio millar de alumnos de 3º y 4º de la ESO revela que el 24,6% lleva un piercing y la mitad de los que no lo llevan desea hacerlo en el futuro.

• Los médicos de familia admiten que es preciso conocer los riesgos asociados a estas prácticas en los más jóvenes igual que las dietas desequilibradas, el abuso del ejercicio físico o las nuevas tecnologías.

• La familia continúa siendo el principal factor de influencia en los estilos de vida del menor, aunque cada vez hay más iniciativas de formación en salud desde la escuela.

Un tercio de los adolescentes que lleva un piercing está convencido de que esta práctica no entraña ningún riesgo. Y los que afirman conocer dichos riesgos los limitan a infecciones locales pasando por alto otras complicaciones más relevantes como las enfermedades bucales, necrosis, granulosas o la parálisis de párpado. Así lo demuestra un estudio* realizado en Cataluña con 526 alumnos de 3º y 4º de la ESO, cuyos resultados se han presentado en el 31º Congreso de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), que hasta el viernes 10 de junio se celebra en Zaragoza.

Este trabajo revela que un 24,6% lleva un piercing y la mitad de los que no lo llevan desea hacerlo en el futuro. Una práctica tan común responde, según la doctora Rosario Jiménez, del Grupo de Atención al Adolescente de semFYC, al hecho de que durante la adolescencia lo normal es intentar parecerse al grupo de iguales y a la vez marcar distancia con los "mayores". "Son además momentos donde la imagen corporal y la estética son muy importantes para toda la sociedad. No obstante, los tatuajes o los piercing no son hábitos tóxicos. De hecho, siguiendo unas normas mínimas, los riesgos pueden ser poco reseñables y, sobre todo a largo plazo, prácticamente nulos", añade.
El estudio refleja igualmente que la media de edad de los que llevan un piercing o un tatuaje es de 15,13 años, es decir, está por debajo de la edad legal establecida para realizarlo sin autorización. La doctora Jiménez aclara que aunque los riesgos para la salud de los piercing no dependen de la edad, la normativa determina que hasta los 16 años los padres deben aprobar esta práctica en sus hijos. "Suelen ser permisivos con algo que no provoca tanto rechazo como años atrás. No obstante, el menor y la familia deben conocer las normativas legales y sobre todo los riesgos para la salud según la localización. Es imprescindible que esta práctica se lleve a cabo siempre en un centro autorizado". Existen páginas web con información de interés que ayudan a aclarar dudas (http://www.aepap.org/joven/piercing.htm).

Preguntar al profesional médico
La experta de semFYC afirma que en la consulta los padres suelen preguntar al médico, especialmente, si el piercing lo lleva un menor y se localiza en la lengua o en zonas más comprometidas. Se muestra igualmente partidaria de que los profesionales que trabajan en un centro de salud conozcan estas técnicas igual que deben conocer las dietas desequilibradas, el abuso del ejercicio físico o las nuevas tecnologías. "Aun así", admite, "si bien podemos y debemos facilitarles toda la información posible, lo cierto es que al final la decisión es en exclusiva del propio adolescente. El consejo debe darse desde la confianza de la consulta y en un espacio de atención personalizada y global. Podemos hablar de todo pero nunca quedarnos sólo en la recomendación sanitaria sino más bien tratar de abrir espacios para que ellos pregunten sus posibles dudas".

Promoción de hábitos saludables
Precisamente la reunión de Zaragoza se abre hoy con una actividad comunitaria encaminada a la promoción de hábitos saludables y estilos de vida sanos de alimentación y ejercicio entre los escolares. La doctora Jiménez asegura que la familia continúa siendo el principal responsable de los estilos de vida entre los más jóvenes "El ejercicio, comer en familia una dieta sana, hacer el desayuno en casa o evitar según que alimentos son hábitos muy marcados por lo que se aprende del entorno familiar. Últimamente desde la escuela se llevan a cabo cada vez más iniciativas de educación en salud sobre asuntos variados: dieta, hábitos, reciclaje...".

 

* Piercing y tatuajes en estudiantes de secundaria obligatoria, Canyelles Ballús J, Martínez Sánchez L, Vilarrasa Parcerisa P, Sanitjes Garreta D. Abs Vall Del Tenes. Programa de prevención de drogas de la Mancomunitat de la Vall del Tenes. Lliça D'amunt. Barcelona