Uno de cada cuatro españoles mayores de 45 años padece algún tipo de artrosis
El próximo 12 de octubre se celebra el Día Mundial de la Artrosis. Uno de esos problemas de salud con un efecto sobre calidad de vida mucho mayor de lo que se piensa, a tenor de los últimos estudios que han analizado este parámetro. En nuestro país, casi un 23% de la población padece alguna enfermedad reumática crónica. También se sabe que una de cada diez visitas al centro de salud está motivada por algún problema del aparato locomotor y que la mitad de éstas lo son por artrosis. Esta enfermedad reumática en cualquier localización del cuerpo afecta al 24% de los españoles con más de 45 años si consi-deramos la artrosis en su conjunto (de rodilla, columna, manos y cadera). Además, las enfermedades del aparato locomotor en su globalidad son la tercera causa de incapacidad temporal y se espera que en el año 2020 se conviertan en la cuarta causa de discapacidad, dado el aumento en la esperanza de vida y el envejecimiento progresivo de la población.
Concienciar y buscar soluciones que mejoren la atención de estos pacientes es el objetivo de la campaña ¿Qué podemos hacer por los pacientes con artrosis?, promovida por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), la Sociedad Española de Reumatología (SER) y la Confederación Española de Pacientes Reumáticos (CONFEPAR), con la colaboración de Merck Sharp & Dohme de España (MSD).
Para el presidente de semFYC, el doctor Luis Aguilera, es imprescindible que distintas especialidades sumen esfuerzos para mejorar la atención de patologías tan frecuentes como las reumáticas. "Como médicos de familia tenemos una posición privilegiada a la hora de conocer al paciente con enfermedades reumáticas, así como para atenderlo en su entorno. La atención compartida, la colaboración entre médicos de familia y reumatólogos, va a redundar siempre en beneficio del paciente. El resultado será aún mejor si, como se pretende con esta campaña, se busca concienciar a la población y sacar a la luz necesi-dades ineludibles de las personas afectadas".
En esa búsqueda de soluciones cabe situar el estudio ARTO PRO, una investigación del Grupo de Reumatología de semFYC iniciada hace dos años con la participación de 4.000 pacientes y más de un millar de médicos de familia. El objetivo era determinar si una acti-vidad formativa y motivadora se traducía en una modificación de la inercia clínica y, en consecuencia, en una disminución del dolor del paciente con artrosis y en una mejor calidad de vida.
Este trabajo también ha servido para conocer la situación real de los afectados por artrosis que se atienden en el centro de salud. Para ello se valoraron diferentes aspectos como su calidad de vida respecto a la población general, la confluencia de otras enfermedades, qué tratamientos farmacológicos y no farmacológicos (rehabilitación, educación sanitaria, etc.) siguen y, en general, cómo es la atención que reciben estos pacientes. Además, se ha podido determinar hasta qué punto es necesario formar e incentivar al facultativo como estrategia para lograr una mejor calidad asistencial y unos mejores resultados en este grupo de población.
Las conclusiones del estudio revelan que los pacientes presentan un alto grado de comor-bilidad y una escasa calidad de vida frente a la población general. Sin embargo, como se-ñala el doctor Alejandro Tejedor, coordinador del Grupo de Reumatología de semFYC, "lo más destacable ha sido comprobar hasta qué punto estos pacientes se sienten tan mal y constatar que entre ellos es común un cierta sensación de que no reciben toda la aten-ción que necesitan. Su calidad de vida puede llegar a estar tan deteriorada como la que sufren pacientes con patologías tan incapacitantes como un ictus o infarto cerebral que deja como secuela una parálisis, así como graves problemas de movilidad, dolor o trastor-nos del sueño", asegura este experto.
Un paciente informado se siente mejor
El estudio ARTRO PRO ha demostrado que el aumento de atención prestada por los médicos de familia al estado de salud del paciente y la mayor conciencia de la enfermedad por parte de los afectados contribuían a reducir el dolor y mejorar la funcionalidad y la cali-dad de vida. Los autores de la investigación comprobaron que la aplicación de una atención específica sobre la artrosis consistente en valorar protocolizadamente su grado de afectación, dolor y repercusión en la calidad de vida del paciente, es decir, desde informarle sobre los cuidados que tiene que seguir hasta el tipo de ejercicios y rehabilitación con los que puede recuperar su articulación, pasando por consejos sobre alimentación saludable para no aumentar de peso, eran especialmente valorados y se traducían de inmediato en que el paciente empezaba a experimentar mayor bienestar e incluso tener menos dolor.
Según el doctor Tejedor, para el médico también es importante no sólo recibir una forma-ción adecuada, sino disponer de datos e información sobre cómo es su atención al conjunto de pacientes, es decir, obtener una suerte de retroalimentación de su práctica clínica, pudiendo saber si el paciente está satisfecho, si se siente mejor con el tratamiento, etc. "Se nos debe facilitar más tiempo para el paciente con artrosis al igual que hacemos con otros enfermos crónicos, como diabéticos e hipertensos. También ponernos metas concretas con cada uno de ellos".
El doctor Aguilera asegura, por un lado, que es necesario disponer de más tiempo en la consulta para charlar con el paciente y, por otro, que es preciso que estos pacientes puedan tener una mayor oferta y acceso a los servicios de rehabilitación y fisioterapia, así como una mejor educación e información sobre su enfermedad y las pautas de cuidado que deben seguir. "Una tarea esta última que no es exclusiva de los profesionales sanitarios, sino también de la Administración. La solución a sus problemas no sólo pasa por evitar el dolor sino que necesitan además otro tipo de atenciones. No olvidemos que son personas que han tenido que cambiar completamente sus hábitos de vida y en las que es preciso reeducarles físicamente para que recuperen esa articulación".
Plan ICARO
La SER (Sociedad Española de Reumatología) ha puesto en marcha el Plan ICARO, que pretende evaluar y mejorar la calidad asistencial de los pacientes con enfermedades reumáticas y definir los diferentes procesos de acceso, prevención, diagnóstico y trata-miento de estas patologías. Tal y como señala la presidenta de la SER, la doctora Rosario García de Vicuña, "con este proyecto, nuestra sociedad se compromete a impulsar en los próximos años un plan continuado que integre la investigación y generación de instru-mentos encaminados a optimizar el cuidado de estos pacientes, integrando la visión de todos los agentes implicados. En este sentido, es prioritario establecer alianzas con socie-dades científicas, asociaciones de pacientes y administraciones sanitarias, así como insti-tuciones docentes, unidades de investigación, organismos de evaluación y medios de co-municación que aseguren no sólo el desarrollo sino también la implantación de esta inicia-tiva".
Para la doctora García de Vicuña, "las intervenciones derivadas de este plan deberán tener impacto en varias áreas, contempladas en el catálogo de medidas generales del Plan Nacional de Calidad de Sistema Nacional de Salud, a través de estrategias concretas".
Entre sus objetivos se incluyen:
• Mejorar la práctica clínica y disminuir la variabilidad no justificada, mediante un sistema de evaluación que permita identificar actuaciones ineficientes y sus causas.
• Apoyar el desarrollo de herramientas y estrategias para mejorar la seguridad del paciente y en definitiva la gestión del riesgo.
• Impulsar la acreditación de la competencia como garantía de calidad y excelen-cia profesional, tanto de profesionales individuales como de unidades de reu-matología.
• Generar un cambio de cultura entre los asociados para que conozcan los obje-tivos y se familiaricen con las herramientas que pretendemos desarrollar y apli-car. En definitiva, desterrar el mito de "juzgar" a favor de "autoevaluar para me-jorar".
• Promover la creación dentro de la SER de un grupo de trabajo de Calidad Asis-tencial Práctica clínica y Auditoría.
Concretamente, para los pacientes con artrosis, el Plan ICARO contribuirá a definir los diferentes procesos de acceso, prevención, diagnóstico y tratamiento de su enfermedad y cómo y cuándo debe intervenir cada especialidad (Medicina de Familia, Reumatología, Rehabilitación, Cirugía Ortopédica y Traumatología). "Dado el alcance del plan y las dife-rentes áreas en las que queremos que impacte, el plan está concebido para desarrollarse en subproyectos que definirán herramientas o estrategias según el área, que deberán im-plantarse y ser evaluadas. Por todo ello, aunque pueda haber resultados de algunos sub-proyectos en dos años, es previsible que se alargue a tres o cuatro años", concluye la doc-tora García de Vicuña.
Marcha por la artrosis
Otra de las acciones previstas en esta campaña es la celebración de una marcha, bajo el eslogan "Camina: que la artrosis no te pare", el próximo miércoles 7 de octubre a las 11:30 horas en los Jardines del Canal (Madrid), que cuenta con la participación de todas las sociedades involucradas y está apadrinada por Bertín Osborne y Fabiola Martínez.