El párkinson
3.6. El párkinson
La enfermedad de Parkinson es un trastorno crónico que afecta, fundamentalmente, al movimiento. Sus síntomas principales
son
el temblor, la rigidez, los movimientos lentos y los problemas en el andar y en el equilibrio
.
El diagnóstico se hace por los síntomas, aunque al principio de la enfermedad, cuando los síntomas son leves, pueda ser difícil
hacerlo. No se necesita hacer ninguna prueba ni análisis para diagnosticarla. Hay algunas enfermedades que parecen ser un
párkinson pero realmente no lo son, y algunos medicamentos que producen los mismos síntomas.
Para afrontar esta enfermedad, es muy importante la actitud y participación del paciente y sus familiares: la mayor parte
de personas con párkinson pueden llevar una vida independiente y activa los primeros años, a pesar de las limitaciones que
impone la enfermedad.
Con los años, la enfermedad progresa, a pesar del tratamiento, y el paciente termina siendo dependiente.
¿Qué puede hacer?
O
El objetivo del tratamiento es la mejora de sus síntomas.
Su médico o médica tiene que verle con cierta frecuencia
porque el control de la medicación no es sencillo.
No
suspenda de forma brusca la medicación.
O
Además de los medicamentos, hay medidas que tienen
gran utilidad en el control de la enfermedad. Adóptelas
como propias y
sea el protagonista
en su desarrollo:
– No dude en
pedir ayuda
. La enfermedad no se vence en
soledad. Los
grupos de apoyo
de personas en su mismo
estado (asociaciones de enfermos de Parkinson)
pueden ayudarle. Puede ser necesario el tratamiento
psicológico.
–
Coma sano y variado
,
con una dieta rica en fibra
para prevenir el estreñimiento. Coma despacio y poca
cantidad en cada bocado. Si tiene dificultad para tragar,
evite los alimentos muy líquidos (sopas, caldos, etc.),
la consistencia mejor es la de los purés, yogures, etc.
–
No tome alcohol.
–
Haga ejercicio.
En la medida de sus posibilidades y sin
forzar, siga un programa de ejercicios:
J
Caminar, correr o nadar
20
minutos, al menos
3
veces
por semana.
J
Estiramientos: trabaje los músculos que extienden las
articulaciones para evitar posturas agarrotadas.
– Ejercite la mente: lea, juegue, converse, piense,
mantenga sus relaciones sociales.
– Cuando aparezcan limitaciones, adapte su entorno a
sus necesidades. Evite sofás y asientos bajos, mejor
sillas con brazos y respaldo rígido. Elimine alfombras y
obstáculos en los que pueda tropezar. Los suelos deben
ser antideslizantes. Es mejor utilizar una ducha que una
bañera.
– Adapte su ropa, mejor velcro o goma que botones,
cremalleras o cordones. Para afeitarse, es mejor usar una
máquina eléctrica que cuchillas. Infórmese acerca de los
utensilios de ayuda para comer.
¿Cuándo consultar
a su médico/a de familia?
O
Esta enfermedad precisa un seguimiento médico
continuado, por lo que usted deberá acudir cada cierto
tiempo a visitar a su médico. Es especialmente conveniente
acudir a su consulta si ocurre alguna de las siguientes
circunstancias:
– No tolera la medicación.
– Aparecen efectos secundarios.
– Aparecen síntomas nuevos, como alucinaciones,
desorientación, inmovilidad.
– Empeora su estado.
¿Dónde conseguir más información?
O
http://medlineplus.gov/spanish/parkinsonsdisease.html
O
http://www.parkinson.org/espanol/
10
signos
O
https://es.familydoctor.org/condicion/enfermedad-de-
parkinson/