Qué hacer ante un caso de meningitis
SIGUIENTE
21.7. Qué hacer ante un caso
de meningitis
Una meningitis es una infección de las meninges (membranas que cubren el cerebro y la médula espinal). La causa más común
suele ser viral y mejorar sin tratamiento. Sin embargo, la infección bacteriana más habitual causada por el meningococo,
puede ser extremadamente grave, siendo capaz de provocar daño cerebral o la muerte. El meningococo más corriente en
España es el B, pero cada vez son más frecuentes el W y el Y; el C ha descendido por la inclusión de la vacuna frente al
meningococo C. El período de incubación es de unos
4
días, pero puede oscilar entre
2
y
10
días. El comienzo de los síntomas
suele ser brusco con fiebre, dolor de cabeza y rigidez de nuca, pudiendo acompañarse de náuseas, vómitos, intolerancia a la
luz y confusión. Aunque es menos frecuente (
5
-
20
%) y extremadamente grave, puede presentarse con fiebre, una importante
afectación del estado general y una erupción hemorrágica de la piel muy extensa. Su diagnóstico y tratamiento oportuno y
precoz son esenciales para prevenir lesiones neurológicas permanentes.
Ante la sospecha, contacte inmediatamente con su médica o médica o médico. El paciente precisará ingreso, aunque no es
necesario el aislamiento.
¿Qué puede hacer?
O
En cada comunidad autónoma existe un sistema de
vigilancia epidemiológica que se pone en marcha ante
cualquier caso de meningitis.
O
Si se ha detectado un caso en su entorno, los responsables
sanitarios adoptarán las medidas necesarias y actuarán de
forma inmediata en todos los lugares en los que haya estado
el enfermo (domicilio, centro escolar/preescolar, trabajo).
O
Tras recabar información sobre el paciente (exploración y
pruebas diagnósticas), darán las instrucciones a la familia
y compañeros escolares o de trabajo:
– Vigilancia activa ante la aparición de síntomas (fiebre alta,
dolor de cabeza intenso, rigidez de nuca. erupción cutánea
y vómitos bruscos).
– Administración de antibióticos a las personas que hayan
podido estar expuestas al contagio. La transmisión se
produce de persona a persona a través de las pequeñas
gotitas de las secreciones respiratorias o de la garganta.
Se precisa de un contacto estrecho y prolongado con el
enfermo durante un período de
2
a
10
días (besos,
estornudos, tos, compartir alimentos y utensilios para
comer, dormitorios colectivos, convivencia).
– Se puede reducir el riesgo de contraer la enfermedad de
una persona infectada a través de una buena higiene
personal, evitando compartir alimentos, utensilios, vasos u
otros objetos con una persona que pueda estar expuesta o
que tenga una infección, y lavándose con frecuencia las
manos.
– Administración de la vacuna para la prevención de la
meningitis a todos los contactos si la enfermedad está
causada por un serogrupo para el que hay vacuna. Existen
cuatro vacunas conjugadas (dos frente al serogrupo C y
dos frente a los serogrupos A, C, Y, W-
135
). También se
dispone de dos preparados comerciales de vacuna para el
serogrupo B. Todas son seguras, bien toleradas, con efectos
adversos infrecuentes, leves y transitorios.
¿Cuándo consultar a su
médico/a de familia?
O
En España se recomienda en el calendario vacunal, la
vacunación sistemática de todos los niños contra el
meningococo C a los
4
y
12
meses; además, se ha sustituido
esta dosis de MenC por la vacuna MenACWY a los
12
años,
con una dosis de rescate a los
19
años. No se considera la
vacunación sistemática frente al MenB. Existe un carnet
de vacunas que asegura con su consulta que el niño o niña
está recibiendo estas vacunas. También disponen de esta
información su médico o médica de familia y su pediatra.