Actualidad
Las emociones en la práctica asistencial y la ética narrativa, en el DocTutor de Abril
Fecha de publicación: 17 de abril de 2023
La Etica Narrativa o narrativa clínica es el asunto del que trata el número de abril de la revista DocTutor, en tanto a su aportación a la enseñanza de diferentes dimensiones clínicas y profesionales como la ética y el profesionalismo. “La Ética Narrativa precisamente pretende trabajar y enseñar ética atendiendo las emociones que aparecen en los protagonistas de la práctica asistencial”, se afirma en la introducción de la publicación.
El primero de los cuatro artículos que componen el número lleva por título Emociones y Ética. En él se trata de la necesidad que estudiantes y residentes tienen de trabajar con las emociones y lo que los enfoques narrativos pueden ofrecer en este sentido. No se puede olvidar que trabajar con emociones es uno de los retos más importantes que tienen los clínicos en sus relaciones con los pacientes. Y que la educación en los sanitarios, médicos y enfermeros, desde hace pocos años incorpora rutinariamente la empatía.
Marylis Guillemin y Lynn Gillam, profesoras del Centre for Health Equity, School of Population and Global Health de la Universidad australiana de Melbourne, son las autoras de La narrativa como medio para enseñar bioética, segundo texto del número. En él proponen una pedagogía de la ética narrativa que utiliza historias de vida personales de profesionales sanitarios y sus experiencias con pacientes, familiares y colegas para actuar como base para la reflexión y el compromiso éticos.
El número se completa con dos narraciones presentadas en la I Jornada Internacional de Narrativa Clínica celebrada en la UFV el pasado mes de enero. Por un lado la de la médica de familia Sara Yebra Delgado. Titulada Verde agua, se trata de un durísimo relato en el que cuenta cómo se enteró del suicidio de una de sus pacientes, una mujer mayor y sola a quien la médica le había regalado un libro.
Cierra la publicación Aparentemente ebrio, de la Residente de Segundo año de Medicina Familiar y Comunitaria de Gijón Marta González González. En él cuenta una noche en el hospital, tras muchas horas de guardia. Y cómo atiende a una paciente con un intento autolítico que en principio parecía una ‘simple’ borrachera.
El primero de los cuatro artículos que componen el número lleva por título Emociones y Ética. En él se trata de la necesidad que estudiantes y residentes tienen de trabajar con las emociones y lo que los enfoques narrativos pueden ofrecer en este sentido. No se puede olvidar que trabajar con emociones es uno de los retos más importantes que tienen los clínicos en sus relaciones con los pacientes. Y que la educación en los sanitarios, médicos y enfermeros, desde hace pocos años incorpora rutinariamente la empatía.
Marylis Guillemin y Lynn Gillam, profesoras del Centre for Health Equity, School of Population and Global Health de la Universidad australiana de Melbourne, son las autoras de La narrativa como medio para enseñar bioética, segundo texto del número. En él proponen una pedagogía de la ética narrativa que utiliza historias de vida personales de profesionales sanitarios y sus experiencias con pacientes, familiares y colegas para actuar como base para la reflexión y el compromiso éticos.
El número se completa con dos narraciones presentadas en la I Jornada Internacional de Narrativa Clínica celebrada en la UFV el pasado mes de enero. Por un lado la de la médica de familia Sara Yebra Delgado. Titulada Verde agua, se trata de un durísimo relato en el que cuenta cómo se enteró del suicidio de una de sus pacientes, una mujer mayor y sola a quien la médica le había regalado un libro.
Cierra la publicación Aparentemente ebrio, de la Residente de Segundo año de Medicina Familiar y Comunitaria de Gijón Marta González González. En él cuenta una noche en el hospital, tras muchas horas de guardia. Y cómo atiende a una paciente con un intento autolítico que en principio parecía una ‘simple’ borrachera.