"En el 27 Congreso Nacional de Entrevista Clínica y Comunicación Asistencial de Donostia pondremos el énfasis en la relación de la comunicación con el género"
Entrevistamos a Juan Carlos Arboniés Ortiz, Presidente del Comité Organizador y a Juan José Rodríguez Salvador, Presidente del Comité Científico del 27 Congreso Nacional de Entrevista Clínica y Comunicación Asistencial a propósito de cómo ven la organización del evento de este año en San Sebastián y de cómo se prevé la participación.
La Entrevista Clínica es de por si uno de los elementos clave más importantes para cualquier médico. Buena parte de la literatura científica dirigida a la gestión del paciente está enfocada a sus técnicas y a la reflexión acerca de la misma. ¿Qué significa la Entrevista Clínica para vosotros?
La Entrevista Clínica y la Comunicación Asistencial pueden ser vistas como la herramienta que facilita la conexión entre las personas y su padecimiento con la ciencia médica; es decir, permite a los médicos entender el sentido de la clínica y a los pacientes sentirse comprendidos y cuidados. Nosotros solemos decir que la comunicación asistencial tiende puentes entre la medicina basada en la evidencia y los pacientes. Es indudable que los médicos necesitan manejar con soltura un enorme abanico de conocimientos y de técnicas para ser capaces de prestar una atención profesional adecuada; por ello, la mayor parte de la ingente investigación tiene un carácter eminentemente biomédico. Pero no es menos cierto que sin un buen entrenamiento en técnicas de comunicación sus “habilidades técnicas” no rinden como debieran. Y esto, hoy día, solo lleva a la frustración y al desencanto profesional, a una atención subóptima y a la falta de alivio del sufrimiento de los pacientes y de sus familias. Sin embargo, y aunque cada día mayor conciencia de la necesidad de entrenarse en aspectos comunicacionales, no todos los profesionales están de acuerdo en dedicar tiempo y esfuerzo a este aspecto tan esencial de la formación. El problema es que aún nos resulta muy difícil reconocer que necesitamos mucho tiempo y esfuerzo para aprender a dar malas noticias, a motivar, a escuchar y comprender a los familiares, a compartir el proceso de toma de decisiones en la práctica asistencial, a afrontar situaciones de tensión con nuestros pacientes...
El 27 Congreso Nacional de Entrevista Clínica y Comunicación Asistencial tendrá lugar en una localización muy especial este año, en San Sebastián, que también es la Capital Europea de la Cultura. ¿Cuál es la razón que se haya escogido esta población del País Vasco este año?
Este año San Sebastián es un hervidero de actos culturales. El haber sido declarada Capital Europea de la Cultura ha animado a muchas instituciones y asociaciones a presentar sus iniciativas. Nosotros también nos hemos sentido atraídos por esta necesidad de exponer a la sociedad nuestras convicciones y nuestra forma de entender la asistencia sanitaria. Participamos de la ola de optimismo que cubre la ciudad e intentamos contribuir con nuestro granito de arena. Pensamos que, con su belleza, su carácter amable y sus pintxos, entre otros atractivos, San Sebastián este año va a potenciar el increíble ambiente que habitualmente se crea entre los congresistas que se acercan anualmente al Congreso del Grupo Comunicación y Salud. La verdad es que esperamos que todos los que se decidan a asistir al congreso van a poder disfrutar no sólo de del ambiente de compañerismo y solidaridad que rodea al propio congreso, sino también de una ciudad increíble volcada este año, un poco más si cabe, en satisfacer al visitante.
¿Qué destacaríais como elemento diferenciador del Congreso de este año?
Este año se han presentado muchas propuestas y muy atractivas sin duda. Si tenemos que destacar alguna en especial, diremos que pondremos el énfasis en la relación de la comunicación con el género, que es un campo que necesita ser puesto “a punto” a medida que la sociedad avanza hacia una relación más igualitaria entre sexos. De forma paralela, en este congreso también se va trabajar intensamente sobre el componente emocional de la comunicación asistencial, además de los aspectos clásicos relativos a la comunicación.
Por otra parte, este congreso pretende acoger en su seno a todos aquellos colectivos profesionales que se van sensibilizando respecto a la necesidad de comunicar adecuadamente con los pacientes, para conseguir practicar una asistencia sanitaria más humana; pensamos en que se va a incrementar la presencia de enfermeras, psicólogos y fisioterapeutas, respecto a ediciones anteriores. Otro aspecto muy importante para nosotros consiste en la estrecha colaboración que se ha establecido con la Universidad del País Vasco en la organización del congreso, lo que se va a traducir en una presencia de estudiantes notable.
Por último, queremos destacar el esfuerzo que hemos hecho para asegurar la presencia de pacientes en algunas de las mesas de debate más significativas del congreso. Los pacientes van a tener la oportunidad de transmitirnos su punto de vista sobre la forma en que les interesa que comuniquen los profesionales; seguramente nos aconsejarán y nos ofrecerán guías de actuación para ponerlas en acción en la práctica diaria.
El periodo de Envío de Comunicaciones se cerró el pasado 6 de julio. ¿Estáis satisfechos con el índice de participación que habéis tenido?
Como en ocasiones anteriores, este año también ha habido una avalancha de propuestas de comunicaciones al Congreso. Por ello, en primer lugar, queremos trasladar nuestro agradecimiento a todos los profesionales que han enviado sus propuestas tanto por la calidad de los trabajos como por el enorme esfuerzo que han realizado. Hay que tener en cuenta que el periodo para realizar sus experiencias, sus investigaciones y sus proyectos ha sido realmente corto, debido principalmente a que hemos adelantado unos meses la fecha de celebración del congreso. Además, han tenido que preparar los resúmenes en un tiempo récord y en una época del año especialmente difícil como son los meses pre-vacacionales. Pero lo cierto es que dispondremos de un amplio abanico de experiencias realizadas en el ámbito de la comunicación asistencial con ideas innovadoras y resultados esperanzadores que nos animarán a profundizar en la práctica de la entrevista clínica y la relación profesional-paciente. Desgraciadamente, disponemos de un tiempo muy escaso para la exposición oral de las comunicaciones, por lo que la mayor parte de ellas serán expuestas en formato póster. Las diez mejores comunicaciones serán presentadas oralmente y la que resulte elegida mejor de ellas recibirá como premio una inscripción gratuita al próximo Congreso del Grupo Comunicación y Salud de la semFYC.
Es importante señalar también que se han presentado una decena de proyectos de investigación de mayor envergadura, que van a ser contrastados y debatidos en la mesa de investigación (RICYS) y que optan al “Premio Francesc Borrell”, consistente en una beca de investigación de 1000 euros.
El 14 de septiembre se cierra el periodo de envío de fotografías, videos y también se daba la posibilidad de mandar cuentos y/o relatos. ¿Cómo valoráis la participación que os está llegando este año?
El carácter de este congreso invita a explorar otras formas de contemplar la comunicación asistencial. Nosotros le damos mucha importancia a la creatividad en este campo, por lo que reservamos espacios, tiempo y esfuerzo a los trabajos audiovisuales y, por supuesto, a la transmisión de experiencias más clásica en forma de relato. En esta ocasión, sin embargo, hemos notado sobremanera los problemas de oportunidad que mencionábamos cuando comentamos las dificultades que han tenido los autores al poner a punto sus trabajos para enviarlos al congreso. Consecuentemente, hemos animado a los congresistas a realizar un esfuerzo extra y hemos ampliado los plazos de recepción de fotografías, vídeos y relatos. ¡Esperamos recibir muchos más!
Hace un año entrevistábamos a Fermín Quesada a propósito del Congreso de 2015 y le preguntábamos: ¿Cuál dirías que es la mayor dificultad con la que puede encontrarse un médico de familia en la consulta con la situación del Sistema Nacional de Salud actual?, según él, el mayor problema son las prioridades políticas y la sobrecarga de trabajo. ¿Añadirías alguna cosa más?
Creemos que el médico de familia, casi por definición, va a tener siempre una gran “sobrecarga de trabajo”, entre otras cosas, porque “siempre podemos hacer algo más” para aliviar el sufrimiento del paciente y de su familia. Y si no podemos hacer nada más, investigamos sin cesar “qué más podríamos hacer”. Si algo nos caracteriza como profesionales es esa pulsión por mejorar nuestra actuación, lo que nos lleva a dedicar tiempo y esfuerzos a dominar algún aspecto concreto de los muchos que ofrece esta especialidad; bien sea la investigación, la docencia, la gestión, la Medicina basada en la evidencia, la diabetes, el dolor crónico... ¡la Comunicación Asistencial!, etc. Además, siempre hemos trabajado en un escenario real en el que los recursos se nos han antojado escasos, aún en tiempos de “relativa bonanza”. Por todo ello, si yo tuviera que elegir ahora “cuál es la mayor dificultad con la que puede encontrarse el médico de familia en la consulta del SNC” sin duda alguna respondería que consiste y consistirá siempre en entender a los pacientes y a sus familias, en comprender su sufrimiento y en empatizar con ellos. Tenemos ahí un déficit crónico que solo conseguimos aliviar parcialmente con mucha, mucha dedicación. Este es nuestro verdadero desafío diario. En otro plano, nos enfrentamos también a la creciente ampliación de campos de actuación y al aumento incesante de utilización de los sistemas sistemas informáticos de gestión de la consulta. En nuestra opinión, la mayor dificultad que encuentra el médico de familia en la consulta consiste en adaptarse a todos estos cambios y, a la vez, preservar tiempo para escuchar a los pacientes y a sus familias, para explorar cabalmente, para acordar con ellos las actuaciones más adecuadas, etc. Trabajamos con mucha presión de tiempo para llevar a cabo una tarea tan compleja.
Finalmente, no queremos despedirnos sin insistir en que los numerosos talleres del congreso, así como las mesas, se desarrollarán de una forma eminentemente práctica, lo que sin duda ayudará a los asistentes a compartir herramientas útiles para aplicar en su práctica diaria. Por todo esto os animamos a que os sumeis a la “Ola de la comunicación” los día 13 al 15 de Octubre de 2016 y acudáis a nuestro 27 Congreso Nacional de Entrevista Clínica y Comunicación asistencial.
Consulta toda la información del Congreso en su página web siguiendo el enlace.