
Remedios Martín: "Este nuevo programa potenciará mucho más el papel de los médicos y médicas de familia en nuestro Sistema Nacional de Salud”
El Ministerio de Sanidad ha aprobado un nuevo Programa Oficial de la Especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria, que ha sido publicado hoy, 30 de julio, en el Boletín Oficial del Estado (BOE), un cambio esperado desde hace casi dos décadas. Esta actualización llega en un momento crucial para adaptar la formación médica a las necesidades actuales y futuras de la población española.
Para entender mejor el impacto de esta aprobación, hablamos con la presidenta de nuestra sociedad científica Remedios Martín. En esta entrevista compartimos sus reflexiones sobre el significado, las expectativas y los beneficios de este nuevo programa.
¿Qué significa la aprobación del nuevo programa para la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria?
Pues es un hito y, además, un hito muy esperado. El programa actual de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria tiene casi 20 años, desde 2005. Todos esperábamos avanzar en lo que es la formación especializada y tener un nuevo programa que se adapte a las necesidades que han ido cambiando a lo largo de estos años. Nosotros, como sociedad científica comprometida con la formación de excelencia y, sobre todo, con una atención primaria de calidad, esperamos y creemos firmemente que este nuevo programa va a ser robusto. Estamos convencidos de que potenciará mucho más el papel de los médicos y médicas de familia en nuestro Sistema Nacional de Salud.
¿Cuáles son las expectativas y objetivos a largo plazo de la Sociedad con respecto al nuevo programa?
El programa tiene que ser, y será, un programa robusto que asegure que los médicos y médicas de familia adquieran competencias para aumentar la calidad y, sobre todo, para mejorar la capacidad resolutiva. La Atención Primaria debe ser el verdadero eje del sistema, su corazón, como dice el Ministerio y la ministra actualmente. Para ello, necesitamos un programa de especialidad que facilite que nuestros médicos y médicas de familia residentes adquieran las competencias necesarias. No podemos olvidar algo muy importante: las unidades docentes. Queremos que este nuevo programa apueste por unidades docentes potentes, no solo en competencias de jefes de estudios y tutores técnicos, sino también en recursos humanos y métodos. Es crucial tener una visión integral, no solo sobre las competencias del programa, sino también sobre su desarrollo y el entorno en el que se implementará.
¿Qué beneficios crees que este nuevo programa aportará a la Atención Primaria y a la salud comunitaria en España?
El nuevo programa debe abordar todos estos cambios demográficos y estructurales que hemos experimentado en 20 años y realmente tiene que ser un programa de calidad, adecuado a las necesidades reales y futuras de nuestra ciudadanía y de nuestros pacientes. También es cierto que en estos 20 años han cambiado las competencias de los médicos y médicas de familia, no solo en lo clínico, sino también en habilidades y competencias en el uso de nuevas tecnologías, como la ecografía y otras técnicas de diagnóstico. Para nosotros, cambiar un programa de especialidad es avanzar hacia la excelencia y mejorar las competencias de los médicos y médicas de familia. En este momento, nuestro programa de especialidad es robusto, pero necesita avanzar en el abordaje de la atención a las personas desde una perspectiva poblacional y, sobre todo, con una mirada comunitaria, que es la perspectiva de futuro que necesitamos.
La aprobación del nuevo programa de la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria marca un momento decisivo para la sanidad en España. Este cambio busca no solo actualizar la formación de los profesionales en función de las demandas actuales, sino también fortalecer la Atención Primaria como el núcleo del sistema de salud. Desde la semFYC vemos en este cambio una oportunidad para garantizar una formación de excelencia que responda a las realidades demográficas, tecnológicas y sociales de hoy en día. El objetivo es ofrecer una atención sanitaria de calidad que beneficie tanto a los profesionales como a la comunidad en general.